I
Alguna vez se dijo que la mujer nació del barro y
de las costillas de un hombre. Se dijo que hubo algo superior que tomó puro
barro para crear al hombre y ante ello, se podría decir que, gracias a la
sumatoria de tierra y agua no solo se obtiene barro, sino que se creó una de
las obras más perfectas, en tanto su dinamismo imperfecto, a lo largo de toda
la Historia del Arte.
Hoy hay dos propuestas que quiero vincular. Una
literaria y la otra plástica.
II
La Biblia, cuando relata el génesis del mundo
procede a establecer los días de la creación del mismo, luego el comienzo de la
especie gracias a este gesto manual, técnico o de artesano, si se quiere, de
moldear con alguna sustancia a lo que pronto se transformará en una figura, en
un ser humano.
III
Macarena, por su parte, realiza un acto gestual
similar al que describe la Biblia, en tanto creación de lo que se convertirá en
el futuro, en una figura que es fruto de la experimentación de la artista con
su entorno, la naturaleza.
IV
Desde nuestros antepasados la tierra y sus bondades
fueron resolviendo problemas y/o inquietudes de las personas. Es así como las
plantas fueron las que otorgaron pigmentos a las ropas y pinturas, fue así como
crearon sus casas y cómo se alimentaron.
V
Macarena busca al igual que los antepasados las
bondades de la naturaleza en un lugar particular, Rari, su espacio y tierra
natal. Así, es como intenta crear a partir de la observación, de su experiencia
de vida y de su entorno, no solo aquello con lo que ejecuta la obra. No son sólo
pigmentos, sino que son historias de trabajo, de clanes, de patrias y de
caminos que se vinculan con ese ejercicio experimental.
Esta exposición nos invita a pensar precisamente en
ello. En nuestros contextos, en el trabajo, en lo que experimentamos con ello y
cómo es que traducimos lo anterior en una experiencia sensible nueva.
VI
“¿Hay zapallo? -”Si, uno puro”. Uno Puro
como dice la gente en el campo. Hay uno puro, una pura cosa u objeto, pero
ademàs de ese criterio de cantidad, hay un criterio de pureza no solo en los
materiales que usa Macarena, sino que se trata de la pureza del campo, de su
gente, de su lugar, de su territorio alejado de la gran capital en donde las
luces no perforan los ojos de las personas y donde los autos no reclaman con
sus estruendosas bocinas, donde el cielo no está gris por la contaminación sino
que lo está porque se avecina un temporal. Así es como Uno Puro es una
exposición que dialoga con la pureza y con el rescate de todos aquellos
aspectos de la tradición, la vida y las personas, que poco a poco van
desapareciendo con el aceleramiento de la vida.
VII
Macarena nos da la posibilidad de pensar en la
conexión que nosotros tenemos con nuestro territorio, nos hace pensar en esa
resistencia que ejerce día a día La Palmilla y Conchalí, para que los edificios
no consumen la muerte de los barrios y las poblaciones con sus vecinos y la
puesta de la vida en común.
Así es como Macarena viene a hacer comunión con la
Palmilla Oriente, en el sentido de compartir su experiencia, sus sensaciones y
sus experimentaciones en un lugar que, al parecer, no está tan alejado a ello.
Las poéticas de Rari y la Palmilla también comulgan en este espacio donde como
siempre, nos juntamos con las bolsitas de pan calentito antes de llegar a tomar
once con la familia y así llevar estas reflexiones y sensaciones a la mesa
donde pronto compartiremos.
Danae Díaz.